Lo Que Siente Nuestro Hijo—
Enseguida lea lo que el hijo dice a su padre o a su madre
»Instruye al niño en su carrera:
aun cuando fuere viejo no se apartará de ella« —Proverbios 22:6
No me des siempre órdenes. Si en vez de órdenes, a veces me pidieras las cosas, yo lo haría más rápido y con más gusto.
No cambies de opinión tan a menudo sobre lo que debo hacer. Decídete y mantén esa decisión.
Cumple las promesas buenas o malas. Si me prometes un premio, dámelo, pero también si es un castigo.
No me compares con nadie, especialmente con mi hermano o hermana. Si tú me haces lucir peor que los demás entonces seré yo quien sufra.
No me corrijas mis faltas delante de nadie. Enséñame a mejorar cuando estemos solos.
No me grites. Te respeto menos cuando lo haces y me enseñas a gritar a mi también, y yo no quiero hacerlo.
Déjame valerme por mismo. Si tú haces todo por mí, yo nunca aprenderé.
Me haces sentir mal y perdería la fé en lo que dices.
Cuando yo haga algo malo no me exijas que te diga el “por qué” lo hice. A veces ni yo mismo lo sé.
Trátame con la misma amabilidad y cordialidad con que tratas a tus amigos, ya que porque seamos familia eso no quiere decir que no podamos ser amigos también.
No me digas que haga una cosa y tú no la haces. Yo aprenderé y haré siempre lo que tú hagas, aunque no lo digas; pero nunca lo que tu digas y no hagas.
Enséñame a conocer y amar a Dios; porque de nada vale si yo veo que ustedes no conocen y aman a Dios.
Cuando te cuente un problema mío no me digas: “no tengo tiempo para boberías”, o “eso no tiene
importancia”. Trata de comprenderme y ayudarme.
Y quiéreme y dímelo. A mí me gusta oírtelo decir, aunque tu no creas necesario decírmelo.
Submitted by Roberto Spencer. We do not know who wrote these words.
You must be logged in to post a comment.
Traction Theme by The Theme Foundry
Copyright © 2023 Copy © 2010 - 2013, ElConquistador.org All Rights Reserved. All rights reserved.