LOS TRIBUNALES de justicia emiten una buena cantidad de órdenes de protección todos los días. La Orden de Protección implica violencia doméstica o amenaza de violencia doméstica. El tribunal de justicia expide una orden que lleva la intención de mantener dos personas separadas para evitar la violencia, desafortunadamente la gente cae una y otra vez en situaciones de violencia. El control es una forma de violencia doméstica.

Muchas gentes ni siquiera reconocen que están siendo controladas. El abuso mental es devastador para muchas personas. Parece ser que en algunos hombres hay una necesidad inherente de querer controlar a sus esposas o novias.

Con alguna frecuencia, cuando alguien pide una Orden de Protección, yo pregunto si acaso su esposo o novio la está controlando. Normalmente la contestación es, “No.” Es entonces cuando le hago el siguiente cuestionario y así es como la persona se da cuenta que sí está siendo controlada.

La Violencia Doméstica es muy obvia cuando involucra la violencia o la ira; Es menos evidente cuando el abuso es “El Control.” Ambas formas de abuso son devastadoras.

Control por Sobre-Protección—
“Es tanto lo que te amo, que no quiero que te lastimes.”

Control por medio del Dinero—
Yo manejo el dinero y a ti te doy nada más para el gasto diario.

Control en el Contacto con Otras Personas—
Aislamiento. De amigos nuevos, de amigos viejos, y de la familia. Mudarse de residencia pude ser una forma de control.

 

Control en las Decisiones—
El controlador hace todas las decisiones: A dónde vamos y a quién vamos a ver.

Control en la Transportación—
Te amo mucho, yo manejo y te llevo a donde quieras ir, no necesitas un automóvil.

Control por medio de la Crítica.—
El controlador dice: “Solo trato de que seas mejor.” Lo que realmente hace es destruir la autoestima y el orgullo de la persona.

Control en Ignorar Tus Necesidades—
Tus necesidades físicas, mentales y materiales son muy importantes para tu bien estar.

El control puede llegar a ser muy violento, pero también puede ser tan inocente como: “Tráeme una tasa de café.” Si el individuo arguye que él es el que sabe qué es lo mejor, dígale que desea salirse de esa relación.

Lección:
Si sospechas que en tu relación alguien está tratando de controlarte, busca ayuda profesional.
Si realmente amas a alguien, libéralo.
Si el amor es verdadero, regresará. . .